JOAQUIN PHOENIX, el actor que pudo llegar a interpretar más de 20 personajes en una sola película.

 

Joaquin Phoenix en La Mostra de Venecia  2024

Joaquin Rafael Bottom Dunnetz, nació el 28 de octubre de 1974 en San Juan de Puerto Rico. Nos referirnos al carismático actor estadounidense  de una gran versatilidad en sus actuaciones, que le ha valido múltiples nominaciones y reconocimientos en su carrera. Es el tercero de cinco hermanos: River (1970), Rain (1973), Liberty (1976) y Summer (1978). Eran veganos y en algunas ocasiones participaron en campañas de Amnistía Internacional.  Su padre, de origen irlandés, y su madre, nacida en el Bronx, de tradición judía. Tiempo después de su boda, se unieron a la Secta Los Niños de Dios y se convirtieron en misioneros. Con el nacimiento de su último hijo (1978), el matrimonio decide abandonar la secta y es el momento en el que Joaquin se cambia el apellido por el de Phoenix, y también el nombre, pasándose a llamar Leal, buscando así tener un nombre más en consonancia con el de sus hermanos, que eran nombres naturalistas. Tras mudarse a Los Ángeles, su madre empieza a trabajar como secretaria en la NBC, su padre como arquitecto paisajista, y  contratan a un agente que, poco a poco, vaya introduciendo a sus hijos en el mundo de la interpretación, siendo sus primeros trabajos en campañas publicitarias y algún que otro show televisivo.

Joaquín Phoenix abandona el proyecto de Todd Haynes Mayo Diciembre

Tras la trágica muerte de su hermano mayor, River, a causa de una sobredosis a las afueras del local de moda, The Viper Room, propiedad, por aquel entonces, de Johnny Deep, Joaquin volvió a la interpretación con el papel de un adolescente en la película Todo por un sueño (1995) dirigida por Gus Van Sant, a la que le seguiría El secreto de los Abbott de Pat O´connor.

Tras estos primeros papeles, vinieron Giro al infierno de Oliver Stone, Asesinato en 8 mm de Joel Schumaker. Ya en el 2000 participó en Gladiator de Ridley Scoot, que le valió una nominación a los Oscar y al Globo de Oro como mejor actor. Repetiría nominaciones en 2005 con la película En la cuerda floja, consiguiendo, por fin, el  ansiado premio, además de ganar la Copa Volpi con The Master, dirigida por Paul Thomas Anderson. A destacar también en su carrera están Señales de M. Night Shyamalan, El bosque, Hotel Rwanda, Her, Puro vicio…

Pero el actor de Napoleón o de Joker, esta última dirigida por Todd Phillips (y con la que ganó un Oscar),   en su currículo cuenta también con algunos retiros antes de comenzar los rodajes,  así como colaborar en un falso documental dirigido por Casey Affleck, titulado I´m still here, que causó un gran revuelo entre el público.   Otra de sus “espantadas” fue en un trabajo de M. Night Shyamalan,  que abandonó dos semanas antes de comenzar el rodaje.  Sus decisiones ocasionaron muchos problemas a las productoras e hicieron que se perdieran  millones de dólares, algo que le acarreó fama de ser un actor problemático, críticas que después, en cuanto el actor alcanzaba la brillantez en alguno de sus trabajos, como sucedió con el de Arthur Fleck en Joker, película que lo catapultó a lo más alto de la industria cinematográfica, se olvidaban rápidamente.

Joaquín Phoenix y Lady Gaga en Joker 2: Folie à Deux

Pocas películas han generado tantas expectativas y debate como Joker. La primera entrega, lanzada en 2019, fue un éxito rotundo, no sólo de taquilla, sino también de crítica, que venía a consolidar a Joaquin Phoenix como uno de los actores más versátiles de su generación, bajo la dirección de Todd Phillips, encarnando el papel de un comediante, devastado por la sociedad, que se convierte en el célebre villano Gotham y cuyo resultado en la pantalla fue deslumbrante, marcando el camino hacia su secuela, Joker: Folie à Deux, que no tardó en llegar, una obra plagada de desafíos que empujaron hasta el límite tanto a los protagonistas  como al equipo de producción, en la que participa Lady Gaga en el papel de Harley Quinn, y con una innegable libertad creativa, puesto que, a lo largo de los meses de rodaje, el guion fue escrito y reescrito varias veces, las secuencia fueron cambiando de rumbo, el caos se instaló en el set…, hasta el punto que Phillips, su director, llegó a describir la situación como “una experiencia liberadora, pero extremadamente difícil de controlar”.

Joker: Floie à Deux no solo fue un ejercicio cinematográfico; fue un campo de batalla. Su director, en una entrevista, afirmó: ꟷ”Es una genialidad fuera de lo común”. En esta línea,  Ridley Scott, que trabajó con Joaquin Phoenix en Napoleón,  perpetuando el significado de estas palabras referidas al actor, lo describió como un hombre “que opera a partir de la intuición”.  Ese enfoque “fuera de lo común” es lo que hace que sus personajes sean memorables (una anécdota: para el papel de Artur Fleck en Joker, perdió 23 kilos).

Por lo demás, podemos decir que ya sabíamos que en Gladiator el actor bueno era él y no Russelll Crowe; que por películas de James Gray, como  La otra cara del crimen,  o por Señales y El bosque de Shyamalan, Joaquín Phoenix era un actorazo… y que, mientras Brad Pitt o George Clooney acaparaban los focos, el tímido y extraño Phoenix sólo hacía un peliculón tras otro y con los mejores directores, papeles arriesgados y brillantes, y que apenas se hablaba de él o de sus tremendas actuaciones. Así se escribe la historia. Es tal su timidez que casi se va al traste el comienzo de su relación con Rooney Mara. Le cuesta abrirse o dar el primer paso. Ése es Joaquin Phoenix.

Es cierto que muchas veces las películas más cercanas, esas que están llamadas a ser arte, suelen ser extrañas, difíciles…y, en general, despiertan  cierto rechazo entre el público. Me viene esto al pelo para hablar de Beau tiene miedo, escrita y dirigida por Ari Aster, un director que en esta historia nos lleva a una realidad indescriptible, de paranoia, de traumas y recuerdos, y a un entorno muy confuso. Una película así solo es posible si tenemos en cuenta el enorme talento de un tipo como Joaquin Phoenix, porque, de lo contrario, en un filme de tres horas de duración, en ese salto al vacío…, los primeros que nos despeñaríamos al precipicio seríamos nosotros, los espectadores. Una película entre la comedia negra en clave surrealista, a veces aburrida pero bien hecha, con un humor muy malvado…, y que se hace difícil llegar a definirla. Por eso, como dice su director, “lo que podemos decir es que Beau es una comedia judía”, una afirmación que quizás tenga mucho que ver con esa idea constante de la culpa que se pasea por todas las secuencias del filme, como sucede en algunas películas de Woody Allen.

Joaquín Phoenix en Beauis Afraid

Beau es un señor de mediana edad que tiene miedo a la vida. La trama consiste en que el viaje que tiene que hacer el personaje para asistir a  la celebración del aniversario de la muerte de su madre ha sido cancelado. La película nos muestra todos los traumas y miedos de Beau, la idea de la culpa, los miedos a la hora de dar un paso hacia adelante… Por otro lado, en ella hay un sinfín de referencias cinéfilas… Están quienes piensan que es un remake de El show de Truman de Peter Weir. Con todo, cuando una película genera tantas opiniones encontradas y esas opiniones se polarizan,  tildándola unos de bazofia y otros de obra maestra, se debe a que  la cinta nos mete en el terreno de las emociones y ahí el descontrol es absoluto. Pero lo que sí podemos afirmar es que, Beau tiene miedo, por mucha pirotecnia que utilice, es un viaje a ninguna parte y una maravillosa, otra más, interpretación de Joaquin Phoenix.